No quiero llevarte en la memoria

no quiero llevarte en la memoria

no quiero a la memoria llena de estorbos de recuerdos
de archivadores con nuestra historia en cortos recuerdos
no quiero llevarte en la memoria
no quiero que llegue el día de cruzarme en tu esquina y sentir los besos frescos en la piel
no quiero darte un saludo fingido acompañado de palabras apresadas
no quiero llevarte en la memoria, para que no se me detenga el tiempo al verte en medio de la gente
no quiero llevarte en la memoria, para pasar de largo sin que me duela

no quiero recordarme a tu lado
para no anhelar el lugar de otra
para no extrañar los besos, y las caricias inocentes

no quiero recordarte a mi lado
para no extrañarte en mis silencios

El problema no es el amor no correspondido...

El problema no es el amor no correspondido... el problema es ilusionarse sola

es dejarse llenar de caricias de besos de palabras
dejarse llevar de los deseos
es querer en silencio a la espera de una respuesta oculta tras un lenguaje sin palabras

el error es querer a un viejo lobo olvidando todas sus mañas...
satisfacer los sentidos es algo primordial y sus mañas se las agradece a esto
sabe seducir sabe conquistar sabe gozar y sabe alejarse...

pequeña caíste en sus palabras, caíste en sus mañas...


---Estefania Aguirre Henao---

El que ustedes no le escuchen en sus lujosos autos no es impedimento ni desmotivación para que el siga dejando que su alma hable por medio de la música.

Busco Departamento con Balcón... preguntar por Julieta

A mi no me gusta el papel de julieta aunque todas las mujeres nacemos para ocupar ese puesto

Detesto estar en un balcón esperando que llegue el hombre de mi vida y encima a escondidas por que, que pena que la vean parada en un balcón como una imbécil mientras el papá hace de francotirador desde la ventana.

Siempre me ha parecido que la parejita resulta ser la viva imagen de lo que suelen ser las relaciones, la muchachita enamorada se finge muerta para que el tipo se muera de verdad y sinceramente no sirvo para hacer de muerta ni para morirme de verdad; alguna vez hice el comentario en una reunionsita con una amiga y su novio me dijo ‘’vos no servís pa esto… es que ud le quita la magia a todo vea como me dejo el pobre balcón de Julieta…’’

Muchas terminan de Julieta con alguno esperando que lleguen a hablar bonito, pero claro, llegan cuando ya se fue a dormir o antes que salga al balcón o si no llega alguno que dan ganas de mandarle un baldado lleno de tintico caliente…

Yo desde que tengo voluntad me he negado a hacer de Julieta, pero de todas maneras en algún momento de existencialismo, me ha pasado que me imagino como seria que romeo llegara a susurrarme al oído algún versito sentado a mi lado, en la mesa del bar donde me encuentro sola mirando el cristal que contiene mi bebida, mientras me pierdo en la música y me distraigo viendo algún romeo ajeno en medio de su muerte consumiendo su cigarro mientras su Julieta hace de muerta… y yo, deliro desde mi puesto en el gran teatro después de negarme a hacer de Julieta.

El encuentro

Sigilosa se abrió paso entre la multitud y como si hubiera escapado de mis sueños se posicionó en mi horizonte como el sol en el ocaso. Mi respiración se detuvo y el silencio que emanaba de mi pecho término por abstraer el bullicio de la calle, mientras un seco buche de saliva se deslizaba en mi garganta haciéndome en su paso titubear por el más absurdo y sutil de los miedos.

Ella conversaba implacable con aquellos que obstruían su camino hasta mi, ignorante de este observador que la

asechaba desde la esquina, donde sentado apreciaba el candor de su belleza astral y como no hacerlo si en verdad no podía ser más hermosa. Vestía el negro manto de la noche y su rostro resplandecía con la claridad de la luna llena; era la belleza del firmamento contenida en un cuerpo mortal y como el firmamento brillaban sus ojos como luceros buscando con desespero a alguien.

Mientras, en mi esquina me sorprendía el estruendo de un corazón palpitando loco y desenfrenado, al ritmo de los tambores del alma; de mi alma. Entonces temí que me viera y el peso de la duda cayó sobre mí aplastándome. Allí, desecho, indefenso y desvalido fui preso del pánico, quien malicioso invadió mi cuerpo en una sombra espeluznante que abruptamente me arrastro lejos de ella.

Con prisa, caminé en dirección contraria, con los ojos puestos en frente a la espera que sus estrellas fueran ciegas a mi huida. No obstante el destino aun tenía una lección que enseñarme: nadie en el mundo escapa a los juegos de eros y su heraldo me alcanzo a lo lejos para hacerme saber que era a mí a quien ella buscaba... así culmino aquel encuentro, postergado entre estúpidas escusas, hasta saber si en su pecho, su corazón tocaba las mismas melodías que precedieron a mi funesta y cobarde partida.

-Duban alvarez-

un conocido que escribe un par de cosas como estas

que me traen un par de recuerdos y me dejan sin palabras

palabras que definitivamente merecen ser leidas

mil gracias por prestarlas al blog